ECONOMÍA | carne argentina | inflación

Continúa el boicot al consumo de carne para que baje su precio

La asociación de Consumidores Libres exhortó a la población a no comprar carne vacuna "hasta que el precio vuelva a niveles razonables y justos".

La fuerte suba que registró el precio de la carne vacuna en los últimos meses llevó a que entidades de consumidores continuaran con su convocatoria a boicotear el consumo de estos productos hasta que baje su valor.

Consumidores Libres exhortó a la población a no comprar carne vacuna y sustituirla por productos con equivalentes valores proteicos "hasta que el precio vuelva a niveles razonables y justos".

En un comunicado, la entidad citó un informe de la Cámara de la Industria y el Comercio de Carnes (Ciccra) que indica que el consumo de carne de vacuna por habitante cayó en enero pasado 7,2% en relación al mismo mes del año anterior.

El boicot al consumo de productos para obligar a los comerciantes a bajar su precio es muy común en Europa.

Héctor Polino, fundador y represente legal de la entidad señaló que "el problema de los aumentos injustificados de precios no se resuelve con la sola publicación en internet por parte de las grandes cadenas de supermercados, sino con la intervención del Estado por un lado, y una actitud pacífica pero activa de los consumidores no convalidando esos aumentos".

Para Polino, "las carnicerías no son formadoras de precios, sino los frigoríficos, los matarifes y las cadenas supermercadistas son los que aumentan el precio a través de altos niveles de remarcación".

El boicot al consumo de productos para obligar a los comerciantes a bajar su precio es muy común en Europa donde recientemente se atacó el precio desmedido del café en cafeterías, obligando a esos comercios a bajar los precios.

En la Argentina se convocó a boicot en los últimos años ante el aumento de precio del tomate, la calabaza, la carne y la cebolla. También ese tipo de boicot fue lanzado contra la telefonía móvil para obligar a su regulación, hecho que aún no se logró, recordó Polino.



Dejá tu comentario