Fin de semana sold out para El Mató en el Luna

El campo del estadio techado se convirtió en un mar de gente. Y las personas, unidas como en un mismo bloque, armaban olas al saltar. Era una misma masa que se movía de un lado a otro. El exorcismo del canto grupal parecía el de una hinchada de fútbol. El pogo no era el pogo tradicional de un recital de punk rock (aunque sí apareció en alguna que otra canción del final, de esas primeras, en las que se le canta a Joni B). 

Él Mató a un policía motorizado tocó el sábado y domingo en el Luna Park. Las entradas se agotaron para ambas funciones. Las fotos son épicas, como todos los shows del grupo indie platense que dio vida a toda una escena musical (y cultural). La excusa era presentar "Súper Terror", su último disco. Pero la cita, en realidad, fue uno más de sus rituales en donde el público -la mayoría +30- se abraza a las canciones con las que creció emocionalmente. Y por eso quienes están abajo del escenario cobran casi tanto protagonismo como los cinco músicos que están arriba. 

Termina una canción pero la gente sigue coreando. Es imparable. Es una pared de sonido que llega al escenario como un tsunami: fuerte, envolvente, inmanejable. La banda se emociona y Santi levanta su pulgar y agradece. El gesto lo acompaña cada vez que está conmovido. Santiago Barrionuevo es conocido como Santiago Motorizado pero también como Santiago Corazón, tal como reza su usuario en redes, y aquí es donde ofrece su corazón. 

El concierto del sábado abrió con la imponente voz e interpretación de Santiago de “El Magnetismo”, canción de La Dinastía Scorpio (2012), segundo álbum de estudio de la banda. Inmediatamente, comenzó Super Terror con “Un Segundo Plan” y en simultáneo un estallido de euforia por parte del público. Se sucedieron una lista de 24 temas más, entre los que estuvieron “La Noche Eterna”, “Navidad en los Santos”, “Medalla de Oro”, “El Tesoro”, “Excalibur” -el momento en el que todo el estadio quedó alumbrado con los celulares- y “Chica Rutera”, entre otras. El cierre, con toda la gente de pie, ovacionando a la banda fue con “Mi Próximo Movimiento”, culminando una noche realmente memorable.

En las pantallas se veían visuales que remitían a las tapas de los discos o nos recordaban parte de los clips, como el de perro bailando con Nina Suárez. También se mantuvo el uso del circuito cerrado de cámaras para mostrar parte de la banda tocando en vivo o el público saltando pero siempre pasado por un filtro que aportaban a la estética general de la puesta. 

Conformada por Santiago en voz y bajo, Guillermo Ruíz Díaz (Doctora Muerte) en batería, Manuel Sánchez Viamonte (Pantro Putö) en guitarra, Gustavo Monsalvo (Niño elefante) en guitarra y Agustín Spassoff (Afloyd) en teclados, la banda platense se mostró como siempre lo hace: bella y fuerte.